Todo desarrollo es un proceso que no puede ser pasivo, sino activo, un sujeto dispuesto a aprender significativamente.
A lo largo de la infancia y la edad adulta, la actividad creadora puede ser influida. Y en el crecimiento de la capacidad creativa, tendrán un papel preponderante los dos ambientes en que se desenvuelve el niño: la familia y la escuela.
Hacer incidencia en el papel que juega la familia en el desarrollo de la creatividad, ya que es el contexto donde comienza su andadura en este mundo, experimentando, jugando, conociendo, y por supuesto, disfrutando.
En la tradición educativa, tanto la escuela como la familia, en el desarrollo del proceso creativo ha sido en gran medida frenado, buscando siempre el prototipo de “niño/a ideal” en aquella imagen que recíprocamente se daban escuela y familia.
Debemos olvidar que existe un ideal de persona porque no es cierto, lo ideal es que cada persona se desarrolle de acuerdo a su propio ritmo, necesidades y siempre con ilusión de aprender a diario, lo que le aportará felicidad. Así como, quisiera insistir en que además de no tener ideales al respecto, tampoco debemos tener expectativas exageradas, simplemente dejar que el niño/a se desarrolle de acuerdo a su propio ritmo.
Finalmente añadir, que es preciso que exista una buena conexión entre ambos ámbitos: familia y docentes, para conseguir el mejor desarrollo de la creatividad, y del niño/a a todos los niveles.
2. Estrategias Metodológicas que potencian la Capacidad Creadora.
Tener ideas maravillosas no es fruto de la casualidad. ¿Qué se puede hacer entonces? ¿Qué factores influyen, qué actividades y métodos son los más adecuados?
Lo mejor es hacer que todos los aprendizajes sean interesantes y accesibles. Familiarizar a los niños/as con su entorno para captar su interés, dejándoles que se hagan sus propias preguntas y sus respuestas.
Voy a destacar algunos de los factores que según Torrance (1967) favorecen el aprendizaje creativo:
• Respetar las necesidades que el niño/a tiene de trabajar solo/a.
• Dar oportunidad o estimular al niño/a de forma adecuada para que pueda avanzar y lograr éxito en su ámbito de interés.
• Brindar oportunidades de desarrollar la responsabilidad y contribuir al bienestar del grupo y de cada niño/a.
• Reducir la tensión creando un ambiente poco punitivo, relativamente.
• Declarar abiertamente lo que tienen de positivo las diferencias individuales.
• Mostrar entusiasmo por las ideas del niño/a.
• Poner en relación a un niño/a al que le cueste ser creativos con otro/a más creativos.
• Emplear la fantasía como medio para establecer contacto con la realidad.
• Sacar partido de las aficiones, intereses y entusiasmo particulares.
• Entregarse a los niños/as sin reticencias.
Las respuestas creativas surgen siempre a partir de experiencias previas del niño/a. Es preciso ayudarles a conocer su entorno, a apreciarlo y respetarlo, creando un clima que haga posible el aprendizaje creativo.
¿Cómo crear un clima adecuado? Algunas sugerencias:
– Ofrecer diferentes actividades y contextos.
– Ofrecer explicaciones claras sobre la naturaleza de la actividad.
– Animarles a que sean originales.
– Respetar los ritmos de aprendizaje.
– Impulsarles a que busquen lo que sale de lo común.
– Realizar una evaluación constructiva.
– Fomentar en ese ambiente el espíritu creador.
En la época infantil resulta más fácil crear este ambiente, aunque se va complicando e incluso desatendiendo según avanzan en edad, y esto es lo que se debe evitar precisamente, ya que es una de las respuestas a ¿Por qué no están motivados hacia el aprendizaje los adolescentes?
3. ¿Qué papel podemos jugar en este desarrollo?
Debemos ser guía y facilitador de aprendizajes, en una doble dimensión:
1. Integridad.
Se busca el desarrollo integral de la persona, considerando todos los aspectos de la persona, desarrollo cognitivo o intelectual, afectivo, social, …
2. Individualización.
Educamos a niños/as concretos, con sus aptitudes e intereses peculiares, que hay que tener en cuenta.
Algunas actitudes que podríamos tener para ayudar al desarrollo de la capacidad creadora en los niños/as pueden ser:
Respetar todas las preguntas, hasta las más extrañas. Es necesario satisfacerle. Se debe estar preparado para las preguntas.
Manifestarles que sus ideas tienen valor.
No vigilarle en exceso, o que no lo note, ya que puede cohibirle.
Debemos escuchar, preguntar, discutir, preparar actividades, sugerir, respetar los silencios, animar, provocar, plantear problemas, estar ausente y presente,… cada profesor debe reflexionar y descubrir su propio estilo.
Disfrutar de la libertad y creatividad con que los más pequeños se desarrollan, tiene un gran valor.
Autora: Rosa Rodríguez (Pedagoga)